India no es un país fácil. Está lleno de contrastes, y en un mismo momento puedes vivir lo mejor y lo peor de India. Como ya he repetido en bastantes posts, yo no recomiendo a nadie viajar o no viajar a este país. Eso es una decisión personal que tiene que salir de dentro de ti.
Si viajas a India porque tus amigos han ido y dicen que mola mucho, o incluso si viajas buscando alguna experiencia reveladora o espiritual, es más que posible que no disfrutes nada del país.
Incluso cuando viajas convencido de que quieres conocer India, cuando has leído un montón de posts por internet y visto mil y un documentales sobre India en la televisión, el viaje se te puede hacer un poco cuesta arriba.
Y por eso recogemos aquí una serie de consejos, algunos más objetivos que otros, para poder viajar a la India.
Indice
Vacunas y seguro médico en India.
El primer consejo parece para novatos pero no lo es en absoluto. Así como en otros países he podido ser más laxa con el tema médico, en India no lo he sido en absoluto. No es que India esté llena de suciedad y por tanto sea un ambiente perfecto para las enfermedades, no nos pasemos. Pero en India hay muchos indios. Imaginaros toda la basura que podemos generar nosotros en nuestros países, y ahora multiplicad por 100 la densidad de población.
Por supuesto que su sistema sanitario está más que saturado, pero como siempre he dicho cuando viajo, en todos sitios hay hospitales privados que son, en muchos casos, mejores que los que tenemos en nuestro propio país. ¿Cuál es el problema entonces? Que por ejemplo en Ranakpur no hay de esos hospitales. El buen servicio médico se encuentra en las grandes ciudades, y si estás en India puede que la ciudad más grande se encuentre a varias horas en coche. Por tanto, mejor prevenir (vacunas) que lamentar (¡contrata un buen seguro médico!).
Agua embotellada
Que, a ver. Otro consejo que es de cajón: compra agua embotellada y úsala hasta para enjuagarte la boca después de lavarte los dientes.
Y ya que vas a comprar agua embotellada (que los propios indios beben, no os creáis que ellos beben de los grifos… aunque sí la usen para lavarse los dientes y cocinar), no cargues en tu mochila con botellones de litro y medio: en cada esquina de tu recorrido encontrarás un puesto en el que vendan agua fresca a precios irrisorios.
Quizás beber de aquí no sea la mejor idea del mundo….
Calcetines para los templos
De momento he viajado dos veces a India. La primera vez hicimos un viaje por el sur de India (Kerala y Tamil Nadu principalmente). En esta zona las visitas principalmente se centran en los magníficos templos con mil y una figuras de colores.
En todos ellos tienes que descalzarte (los zapatos se dejan o bien en algún puestecillo que hay fuera, a cambio de algunas rupias, o si no a alguna vendedora que esté a la puerta del templo) y caminar descalzo, a veces por dentro de ellos y a veces por los patios exteriores.
Tanto en Myanmar como en Tailandia he ido siempre descalza. Se agradecía pisar el frío suelo de los templos (bueno, en Myanmar si era exterior las suelas se te chamuscaban un poco en las horas centrales del día). Pero en India no.
Los suelos no están precisamente limpios, y normalmente también están llenos de pequeñas piedrecitas o arena.
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Te aconsejo que te lleves calcetines (y al final del viaje, incinéralos a los pobres).
Decir no es necesario.
¿Habéis oído hablar de la amabilidad asiática? Las sonrisas, la hospitalidad, el (no nos engañemos) querer agradar al turista…. ¿no?
Bueno. Pues (aquí va mi teoría) en India hemos (nosotros los turistas) maleado tanto a los indios que intentan aprovecharse de nosotros todo lo que pueden y algo más. Timos, estafas, engaños, ventas, insistencia, tuktuks… sí. Lo siento, es lo que hay. Y no lo han aprendido solos, sino que nosotros se lo hemos enseñado (y aquí ese “nosotros” no es solo los turistas, sino también la ocupación británica tuvo parte de culpa).
Así que prepárate para ir caminando y que te ofrezcan de todo. Normalmente sirve con pasar de ellos. El “no, thank you” suele servir, aunque ahí ya te han cazado y saben que hablas inglés, así que algunos intentarán seguir hablándote. Mi consejo: un gesto despreocupado con la mano mientras sigues caminando, así que quede claro que “no, no me interesa”. Ah, y no te agobies… no merece la pena.
El regateo en India
Es “el” consejo para viajar a India. Regatea. Con todo. Ellos van a intentar ganar todo lo que puedan, que falta les hace. Y no les hacemos ningún bien compadeciéndonos y pensando que “qué más nos da pagar todas estas rupias de más, si lo necesitan más que nosotros”.
Si os sobran rupias (o euros) y queréis ayudar, donadlo a alguna ONG que lo sabrá emplear mucho mejor que nosotros.
Tómatelo con calma, fíjate mentalmente un precio máximo, e intenta llegar a ello. Si lo consigues bien, y si no, no pasa nada. En la próxima tienda volverás a encontrar el mismo objeto.
Los cinco sentidos
Pero vamos a ver. ¿Es que no me vas a dar un buen consejo para viajar a India?
Sí, claro que sí. Creo.
Así como en otros países de Asia mi consejo es que disfrutes cada momento a más no poder, que te pares, que respires y que absorbas todo lo que hay a tu alrededor, en India te aconsejo que tengas cuidado si no quieres colapsar.
Lo primero que tienes que hacer cuando salgas del aeropuerto en el que aterrices es acostumbrarte al constante ruido que hay en la calle. Ese ruido tiene que convertirse en un hilo musical al que no hagas caso durante tu estancia, a no ser que quieras volverte loco.
Lo segundo, intentar reducir un poco el círculo que delimita tu espacio vital.
Hay poca gente en India, ¿verdad?
Con el olfato no vas a tener ningún problema: India NO huele mal. De verdad que no. A ver, si vas a los baños de una estación de tren posiblemente el olor no será precisamente bueno, pero en el resto de países también pasa igual.
Una vez tengas controlados estos tres sentidos, quedan los dos más importantes: saborea la comida (si no te gusta el picante puedes decir “mirchi nahi”, que significa “picante no”, aunque no tengas muchas esperanzas en que aquello no pique) más allá del picante. Lo mejor de la gastronomía india no es el sabor que tiene mientras lo come, sino el sabor que te dejan las mil y una especias tras comer (una vez la boca deja de abrasar).
Y, por supuesto, abre bien tus ojos. Mira a todos los sitios y olvídate de hacer fotos. Lo que vas a ver no se podrá reflejar jamás en el objetivo de una cámara.
“Excepto si estás en el Taj Mahal. Esto no parece India, así que haz mil y una fotos”
Viajar por libre en India
Conozco gente que ha ido en grupo organizado a India. Otros que se han presentado en el aeropuerto sólo con el billete de avión y nada más reservado.
Desaconsejo ambas opciones, y propongo una intermedia.
Viajando en grupo organizado te va a faltar libertad. Ya sabéis cómo funciona: te llevan al monumento que hay que ver, te lo enseñan a carreras, te montan de nuevo en el autocar y te dejan en el hotel. ¿Has visto algo de India? Mmmm… poco.
Esto lo vimos desde el coche, iban delante de nosotros. ¿En un autocar podrías verlo?
Viajar improvisando en India, buscando alojamientos sobre la marcha, me parece arriesgado y un poco pérdida de tiempo. India no es un país con ciudades preparadas para caminar cómodamente por ellas. Y además las distancias que hay son muy grandes. Vamos a simplemente imaginarnos: llegas a un lugar (estación de trenes o de autobuses) tras un viaje largo, coges tu equipaje, sales, te asaltan cientos de conductores de tuktuk, regateas, dices que te lleven a cierto hotel (que previamente has buscado), con suerte te llevan hasta el hotel, bajas, lo ves, no te gusta o no hay habitaciones libres, te vas a buscar otro hotel, regatea con otro tuktuk…. Uf.
Mi consejo para viajar a India cómodamente pero a tu aire es contratar un coche con conductor, y los hoteles si quieres antes de ir. Por internet hay agencias que gestionan el coche con conductor y también la reserva de hoteles e incluso transportes públicos si así lo quieres (algún tren o algún avión). De esta manera no tienes que preocuparte por nada, pero tienes la libertad de poder parar en donde quieras, salir de tu hotel a la hora que desees, y moverte a tus anchas, según te vaya pidiendo el cuerpo.
Las guest houses en India
Otro consejo a colación de lo anterior: hay hotelazos en India. Pero hotelazos de verdad. Y NO merece la pena pagar por ellos.
En nuestro viaje por el Rajasthan reservamos un hotel en un palacio inmenso, por darnos el lujo. Y aunque el edificio era realmente increíble, la habitación y la limpieza eran muy inferiores a lo que hemos encontrado en otros hoteles o guesthouses.
Porque ahí está la palabra mágica: guesthouse.
Esto son casas en las que viven los propietarios, pero destinan gran parte a habitaciones, normalmente (o al menos en todas las que yo he estado) con baño propio.
Te encuentras por tanto muy bien situado y en lugares habitados y limpios.
Esta guesthouse nos costó 20 euros por noche y tenía incluso zona de comedor y de cocina… ¡solo para nosotros!
A los indios les gusta la suciedad y los insectos lo mismo que a ti, por tanto, si ellos viven en el edificio, es más que probable que todo esté limpio (y si tienes dudas, siempre te puedes guiar por las opiniones de booking o triadvisor).
No intentar abarcar todo
Quédate con este consejo que me daba mi abuela y es bien cierto: quien mucho abarca, poco aprieta.
India es un país enorme, con una superficie casi como toda Europa junta. ¿Cuántos años has tardado en visitar Europa? Pues lo mismo digo.
Céntrate en una zona y ten siempre en cuenta que las distancias pueden parecer poco en un mapa, pero la velocidad media (y siendo optimistas) es de 50 km/h.
Vas a necesitar mucho tiempo para trasladarte y para poder visitar todo lo que hay para ver.
Y no te preocupes si te quedan “imprescindibles” sin ver: en mi primer viaje no me dio tiempo a ver el Taj Mahal y no pasó nada. De hecho fue una excusa perfecta para poder volver de nuevo.
Darte tiempo y disfrutar
Vas a querer coger el primer avión de vuelta a tu país nada más pises India.
Recuerdo que me lo dijeron antes de viajar a India: “hay gente que nada más llegar a Delhi no aguanta lo que ve y se marcha de vuelta”.
No me lo creía hasta que yo misma pensé que India era demasiado. Que me sobrepasaba, que no podía con todo.
Y es por eso que te he dado estos 10 consejos para viajar a India. Porque son los que a mí me sirvieron para poder tranquilizarme, pausar un poco el torbellino de sensaciones que provoca viajar a India y empezar a disfrutar.
Date un par de días cuando viaje a India… habitúate a lo que es. No intentes cambiarlo. India es como es… y esa es precisamente su magia.
