Girona es una de las zonas de la península que ofrece mayor diversidad paisajística. Desde los pirineos a la costa brava, puedes perderte en medio del mar o la montaña en cualquier época del año.
Pero esta vez decidimos hacer una ruta diferente y sumergirnos en la Girona rural, hacer un recorrido por los pueblos medievales de la provincia. Sin lugar a dudas fue amor a primera vista ya que pasear por las calles de estas hermosas villas fue transportarnos a otros tiempos. Relax para el cuerpo y para la mente.
Una ruta de película por los pueblos medievales de Girona
Como de costumbre y como no nos gusta estar cambiando constantemente de ubicación, decidimos dividir la ruta por cercanía y elegimos dos ubicaciones desde la que nos movimos para visitar los pueblos.
Para encontrar que disfruteis al completo de la ruta medieval os recomiendo que le echeis un vistazo a las casas rurales de Naturaki que encontrareis en varios de los pueblos de la lista. Muy reocmendables si vais con amigos o en familia para que podais reservarlas al completo.
Una vez hecha la ruta de los pueblos, nos pusimos en marcha.
Peratallada
Peratallada es un pueblo medieval con un encanto especial. Situado en el municipio de Forallac. Es un pueblo bastante turístico y se nota si vas en fin de semana o en vacaciones ya que el parking que está a la entrada pasa a ser de pago en esas fechas.
Es un pueblo que se conserva en perfectas condiciones y que no ha perdido nada de la esencia que tuvo años atrás y conserva la armonía arquitectónica rural. Te invita a perderte entre sus calles.
Pals
Pals se encuentra situado encima de una montaña, construido alrededor de una fortaleza ha sabido conservar su esencia y espíritu medieval. Se convierte así en uno de los pueblos con más encanto de la costa brava.
La visita a Pals fue más larga de lo que pensamos ya que nos perdimos por su casco histórico y visitamos algunos monumentos. Es un pueblo para visitarlo con calma y disfrutar del paseo.
No te puedes perder La iglesia de Sant Pere, con más de 1000 años de historia, la torre de las horas, único resto del antiguo castillo, la plaza mayor y el mirador Josep Pla, desde el que hay unas increíbles vistas panorámicas.
Castelló d’Empúries
Castelló d’Empúries alcanzó su máximo esplendor durante la edad media cuando los condes de Empúries la convierten en la capital del condado. Destaca su impresionante iglesia de Santa María del siglo XIII.
Su visita merece la pena ya que es una joya arquitectónica. Se puede visitar de 10.00h a 14.00h y de 16.00h a 18.00h por un precio de 2.5€.
Palau-Sator
El municipio de Palau-Sator está formado por varias pequeñas villas: Palau-Sator, Fontclara, Sant Juliá de Boada y Sant Feliu de Boada. Todo el núcleo de la villa conserva su arquitectura medieval.
La entrada por la calle del portal es como retroceder a siglos atrás. Desde ahí se accede a la torre de las horas, de 20 metros de altura, que formaba parte del antiguo castillo.
Monells
El municipio está construido alrededor del castillo, del que sólo se conservan las murallas. La plaza mayor conserva el encanto de ferias y mercadillos pasados. Ha sido escenario de algunas películas.
Te recomiendo tomar un tentempié en alguna de sus terrazas contemplando la belleza del lugar y pasear por sus empedradas calles del siglo XII.
Peralada
Peralada es conocida por sus bodegas e impresionante castillo medieval. En este pueblo hicimos un alto en el camino para disfrutar de una cata en una de sus bodegas y degustar el famoso cava catalán.
Ofrecen visitas desde todos los precios, desde los 10€ hasta los 50€, dependiendo del tipo de visita que desees. El pueblo también cuenta con un gran casino y campo de golf.
El museo del castillo se puede visitar por 6€ en un recorrido guiado que dura unos 55 minutos aproximadamente y después de la visita nos ofrecieron una degustación de cava. Es un lugar en el que parar y disfrutar.
Beget
Todo Beget es un monumento arquitectónico. Es un pueblo muy pequeñito y se recorre fácilmente, pero merece la pena su visita. Pasa bastante desapercibido entre los turistas y creo que ahí reside su encanto.
Es un buen pueblo para iniciar alguna ruta de senderismo, no fue nuestro caso esta vez, pero sí que lo recorrimos y visitamos la Iglesia de Sant Cristófol, declarada bien cultural de interés nacional. Visitarla es gratis, simplemente aconsejan dejar un donativo para su mantenimiento.
Besalú
Besalú es uno de los pueblos más encantadores de la ruta, aunque ha sido difícil escoger. Famoso por su puente medieval, la Judería y el Mikve, un espacio religioso donde se realizan los baños de purificación del judaísmo y del que solo existen cinco en Europa.
Es uno de los pueblos más visitados de Girona y me llevaría otro artículo hablar de él. El monasterio de Sant Pere es otro lugar destacado en la visita a Besalú. Recorrerla sin prisas y disfruta de cada rincón de este mágico lugar.
Castellfollit de la Roca
Como su nombre indica Castellfollit de la Roca se encuentra situado encima de una roca de 50 metros de altura y más de un kilómetro de largura. El encanto de este lugar reside en recorrer sus estrechas calles hasta llegar a la antigua iglesia dónde se encuentran los miradores.
Este pueblo es la entrada al parque natural de la zona volcánica de la Garrotxa. Las vistas desde los miradores son dignas de contemplar.
Santa Pau
Se encuentra situado en pleno parque natural y sus calles conservan el esplendor de la época medieval. Desde sus murallas hay unas vistas magníficas al valle y si te coge un día claro la vista te lleva hasta el mar.
Destacan su castillo y sus murallas. Además, la plaza mayor sigue conservando el aire espléndido de tiempos pasados y donde se sigue celebrando el mercado todos los domingos desde las 9.00h a las 13.00h. Si coincides en tu visita podrás comprar productos típicos de la zona, ecológicos y artesanales.
Visitar los pueblos medievales en Girona es un plan que no puedes dejar escapar. Puedes hacer una ruta como nosotros en la que estuvimos 6 días paseando por tierras catalanas o bien ir recorriendo el encanto medieval de esta zona en pequeñas escapadas que puedes compaginar con senderismo u otras actividades.